Conoce los principales errores que cometemos sin darnos cuenta, dañando nuestra piel
A nosotras nos encanta vernos esplendidas y jóvenes, pero para lograr eso necesitamos lucir una piel hermosa, su cuidado es fundamental para equilibrar nuestro cuerpo. Pero muchas veces al querer buscar esa perfección o mejorar esas zonas que no nos gustan, nos hacen cometer errores al acudir a tratamientos o métodos incorrectos que nos perjudican y dañan la piel.
A continuación te damos cuales son los errores más comunes que se cometen
Ponerse cremas no indicadas por un dermatólogo
Cada crema tiene distintos ingredientes y sustancias que no siempre se adaptan al tipo de piel que cada mujer posee. Entonces si utilizamos cremas sin autorización, ni conocimiento previo puede causarnos la aparición de acné, puntos negros, sequedad o en caso contrario provocar que la piel se nos ponga grasa. A veces pueden ocasionar reducción de pigmentación entres otros signos. Varias cremas poseen corticoides, antibióticos y antifúngicos. Como consecuencia puede aparecer rosácea, herpes, entre otras. Entonces si quiere empezar a usar cremas se recomienda que primero lo hable con un especialista.
Cambios violentos en el peso
Aumentar y disminuir de peso producen estrías, flaccidez entre otros problemas nada ventajosos con el cuidado de la piel. Por eso es importante cuidar la dieta procurando que sea saludable y equilibrada. Si no puedes sola consulta a un especialista ellos sabrán armar un plan de alimentación saludable y beneficiosa basado en frutas y verduras.
Depilarse con cera el rostro
Nosotras pensamos que la cera reduce la cantidad de vello, pero no es así solo tienen diferentes ciclos y crecen en forma despareja por eso no nos damos cuenta. Igualmente la cera también nos provoca manchas, irritación, flaccidez entre otros problemas. Hay métodos para depilarse menos violentos y dolorosos, como las cremas depilatorias, la pinza aunque es lenta la depilación suele ser el más efectiva y duradera. Además no se provoca ningún daño y la piel vuelve a su suavidad en forma inmediata.
No limpiar su piel todos los días
La limpieza debe ser habitual, porque más allá que utilicemos maquillaje o no, en el ambiente hay microbios y esta suciedad hace que se acumule en el rostro. Se aconseja higienizarla por la mañana y por la noche con productos recomendados por su dermatólogo.
Hacer ejercicio de impacto cuando tenemos celulitis
Este ejercicio se basa en que la persona salte en forma excesiva como en el aerobic, esta clase de ejercicio disminuye los tejidos y desarrolla la aparición de la misma. Puede realizar ejercicios como yoga o pilates.
Efectuar duchas largas con agua muy caliente
Estos suelen ser bastantes placenteros pero pueden producir irritación, siempre se recomienda hacerlo con agua tibia.
No quitarse el maquillaje antes de acostarte
Se recomienda retirárselo del rostro antes de dormir para que la piel respire y se relaje. Durante el día polvo en el ambiente se acumula en nuestro rostro y se envejece, si no quitamos el maquillaje, sin darnos cuenta esto tapara nuestros poros. Tenemos varias opciones para quitarse el maquillaje con toallitas húmedas, cremas y lociones exclusivas para eso.
Tomar sol sin recaudos necesarios
Tomar sol nos hace ver más lindas, pero sin los recaudos esto nos provoca manchas, arrugas y nos envejece la piel. Al mismo tiempo los rayos UV nos producen sequedad y deshidratación. Si queremos broncearnos o solo exponernos al sol se aconseja utilizar protector solar según el factor que se necesite. El mínimo es de 15.
Usar ropa demasiado ajustada
Esto nos provoca mala circulación, por ende retención de líquidos y como resultado negativo la aparición de celulitis. La ropa suelta es la mejor opción además se encuentra como lo última tendencia en la moda.
No dormir bien
La clave principal para tener un cutis perfecto es descansar bien. Debemos respetar las horas de sueño, porque mientras lo hacemos de renuevan las células. Se recomiendo dormir al menos 8 horas diarias. La falta de descanso nos hace perder luminosidad y nos arriesgamos a la aparición de arrugas.